viernes, 31 de mayo de 2013

El Barrio de Alfama en Lisboa

5-6 octubre 2012
En la entrada anterior realizábamos un recorrido por las principales plazas de Lisboa con el que comenzaréis a formaros una idea de cómo está organizada la ciudad. Con esta entrada empezamos a recorrer los barrios más importantes y os hablaré de los lugares de mayor interés de cada uno.
Uno de los medios de transporte más interesantes para conocer Lisboa es montarse en el famoso tranvía 28 que realiza un recorrido de casi diez kilómetros por el centro histórico. Si queréis ser más originales podéis contratar un servicio de tuk-tuks que os permitirá atravesar los callejones más estrechos de la Alfama.

Tranvía 28 en el paso por la Catedral
Si nos situamos en la Baixa veremos dos colinas; de un lado el Chiado y el Barrio Alto y enfrente la Alfama. Este barrio es uno de los más antiguos y tradicionales de Lisboa y en el que todavía podemos encontrar locales donde se interpreta el fado. El nombre de Alfama tiene su origen en el árabe y hace referencia a los manantiales y baños (al-hamma) que se encontraban aquí.
Si comenzamos a subir desde la Baixa nos encontraremos con la catedral de Lisboa. Este templo comenzó a construirse en 1147 y ha tenido restauraciones en diferentes épocas debido a los derrumbes provocados por diversos terremotos. Su estilo es románico al que se le añadieron capillas góticas en siglos posteriores. Con el terremoto de 1755 se destruyeron varias capillas que fueron restauradas durante el siglo XX hasta llevarlo al estado actual.

Catedral de Lisboa - Sé de Lisboa
Interior de la Catedral de Lisboa
Lisboa es una de las ciudades más fotogénicas de Europa y tiene varios miradores muy bonitos desde donde tomar estupendas fotografías (os recomiendo que visitéis esta fantástica página). En la Alfama tenemos el Mirador de Portas do Sol y el de Santa Luzia desde los que podemos ver el río Tajo, las casas blancas de la Alfama y varias iglesias como la de San Miguel y San Esteban.

Mirador de Santa Luzia
Junto al mirador podemos ver la iglesia de Santa Luzia y Sâo Brás que un templo que tiene sus orígenes en la Orden de Malta. Aunque la iglesia no es muy grande merece una visita para contemplar los famosos azulejos portugueses de la fachada.

Iglesia de Santa Luzia y Sâo Bras
Seguimos subiendo la colina hasta llegar al Castillo de San Jorge que tiene una de las panorámicas más impresionantes de la ciudad. Esta fortaleza tiene su origen en una Alcazaba de la época del dominio musulmán de la Peninsula. Tras la reconquista cristiana fue transformado en Palacio Real donde se produjeron importantes hechos históricos durante los siglos XV y XVI. Tras diversos terremotos fue abandonado y quedó en estado de ruina. Desde el siglo XX se han realizado diferentes trabajos para rehabilitarlo y en la actualidad está muy bien conservado. Para información de precios y horarios podéis visitar esta página.

Acceso al Castillo de San Jorge
Lisboa desde el Castillo de San Jorge (foto de 1993)

Después de la visita al castillo os recomiendo comenzar a descender para perderos por las calles de la Alfama, contemplar la vida de los vecinos, y disfrutar de un barrio con mucho encanto. Hay que estar preparado para subir y bajar cuestas y escaleras, pero sin duda es uno de los mejores paseos para descubrir Lisboa.

Calles de la Alfama
Casa dos Bicos - Lisboa
Antes de volver a la Baixa nos encontraremos con la Casa dos Bicos o Casa de Brás de Alburquerque. Este edificio  de 1523 es famoso por su fachada con piedras talladas en punta de diamante (bicos). Su estilo hace referencia a otros edificios del Renacimiento y fue mandado construir por su dueño tras un viaje a Italia. Tras los terremotos quedó prácticamente destruido y perdió parte de su altura. Tras la restauración fue dedicado a distintos usos y en la actualidad acoge a la Fundación José Saramago,  que es uno de los centros culturales más importantes de Lisboa.

miércoles, 22 de mayo de 2013

Plazas de Lisboa

5-6 octubre 2012
La primera vez que visité Lisboa fue poco después del incendio del barrio del Chiado en 1988, y desde entonces he vuelto una y otra vez pues me parece una de las ciudades europeas más encantadoras. Quizás no tiene edificios tan espectaculares como otras ciudades, pero para mi es un placer pasear por las calles y plazas de sus diferentes barrios. He visitado Lisboa en distintas épocas de mi vida y aunque se ha transformado con el tiempo siempre guardará su aire nostálgico.

Praça do Comércio (Terreiro do Paço)
La ciudad está construida sobre varias colinas por lo que hay que estar preparado para encontrarnos muchas subidas y bajadas. Os propongo un primer recorrido por la zona más llana de Lisboa y desde la que podemos comenzar a tomar contacto con los diferentes barrios. Comenzamos junto al río Tajo en la Plaza del Comercio (también conocida como Terreiro do Paço). Esta plaza es una de las más importantes de la ciudad y una de las más grandes de Europa. Originalmente este lugar estaba ocupado por un Palacio y una enorme biblioteca que quedaron totalmente destruidos por el terremoto de 1755. Los nuevos edificios fueron construidos sobre arcadas formando una plaza abierta hacia la ribera del río. En el centro de la plaza hay una estatua ecuestre que estaba siendo restaurada en esta última visita.

Arco Triunfal de Rua Augusta
Atravesando el arco principal de Rua Augusta llegamos a la Baixa. Este barrio fue construido con técnicas arquitectónicas anti sísmicas bastante novedosas en su época. Las calles son perpendiculares y sin desniveles y era la ubicación de diferentes gremios artesanos (de ahí los nombres de rua dos sapateiros, rua dos douradores...). Actualmente es una zona muy comercial en la que encontraréis muchas tiendas de marcas conocidas. Si continuamos por la calle principal de la Baixa nos encontraremos en un lateral con el elevador de Santa Justa, del que os hablaré en una próxima entrada. Antes de llegar a la Plaza del Rossio os aconsejo una parada en la Plaza de Figueira donde podréis encontrar algunos locales con mucho encanto donde poder tomar un café.

Praça Figueira
A continuación nos encontramos con la Plaza de Rossio que es una de las más bonitas de la ciudad. En uno de los laterales podemos ver el Teatro Nacional Doña María II, que ocupa la ubicación de un palacio destruido por un incendio en 1836. Si nos situamos de espaldas a la fachada de este edificio podemos ver las dos colinas principales de la ciudad y en el centro la Baixa. A la derecha está el Chiado y el Barrio Alto, el elevador de Santa Justa y el convento del Carmo en ruinas, y a la izquierda el barrio del Castillo de San Jorge.

Plaza del Rossio (Plaza de Don Pedro IV)
Antes de llegar a la Plaza de los Restauradores nos encontramos con la estación de Rossio que ha sido declarada inmueble de interés público. Comenzó a construirse en 1886 con el objetivo de ser un núcleo de comunicaciones ferroviarias, pero en la actualidad su uso ha descendido. Desde aquí se pueden tomar los trenes hacia Sintra y también es bastante utilizada para conectar con la red del metro.

Estación de trenes de Rossio
A continuación llegamos a la Plaza de los Restauradores. Esta plaza fue construida para conmemorar la liberación del país de los españoles en 1640. En el centro hay un obelisco en el que están inscritas las fechas de las batallas más importantes de la Guerra de la Restauración. Hace algunos años en esta zona había algunos cines que poco a poco han ido desapareciendo. En un lateral de la plaza hay unas empinadas escaleras que llevan al Barrio Alto, pero es más aconsejable utilizar el elevador da Gloria. Si necesitáis información sobre la ciudad podéis visitar la oficina turística que está situada en esta Plaza.

Plaza de Restauradores
Desde la Plaza de Restauradores parte la Avenida da Liberdade que fue diseñada después del terremoto de 1755 como una de las principales vías de circulación por la ciudad. Inicialmente tenía muros a los laterales para limitar su uso a los miembros de clase alta. En 1821 fueron derribados los muros para permitir su uso al público general. La avenida mide un kilómetro y medio aproximadamente, y a lo largo de ella hay varios hoteles de buena categoría, tiendas de marcas de lujo y embajadas. En la mitad del recorrido hay un  monumento dedicado a los caídos en la primera guerra mundial.

Monumento Primera Guerra Mundial en la Avenida Liberdade
Estatua de la Plaza de Marqués de Pombal y al fondo Parque Eduardo VII
  Al final de la Avenida Liberdade está la Plaza del Marqués de Pombal y el Parque Eduardo VII. En el centro hay una escultura del marqués, que fue gobernador de Lisboa en el siglo XVIII. Alrededor de la Plaza hay varios bancos portugueses y buenos hoteles. Desde aquí salen varios autobuses turísticos que recorren la ciudad y que podéis utilizar para volver al centro histórico. Si tenéis tiempo y os gusta la botánica os aconsejo que visitéis la estufa fría
Este recorrido mide unos dos kilómetros y medio y es bastante llano, por lo que lo podéis hacer en una mañana completa antes de conocer los demás barrios de la ciudad.