lunes, 24 de diciembre de 2012

Palacio Real de Phnom Penh y la Pagoda de plata

17 junio 2012
Después de una dura mañana visitando los campos de exterminio de Choeung Ek y la prisión Tuol Sleng, solamente nos quedaba conocer el Palacio real de Phnom Penh y la pagoda de plata para despedirnos de Camboya antes de comenzar el largo camino de vuelta a Madrid.
El Palacio real está situado en un bonito paseo junto al río Tonlé Sap y casi al lado del Museo Nacional. El edificio recuerda bastante al del Palacio Real de Bangkok con sus tejados a varios niveles terminados en punta. Fue construido en 1866 sobre una antigua ciudadela jemer llamada Banteay Kev.

Entrada al palacio real de Phnom Penh
El complejo está dividido en varias zonas y los edificios más importantes son el Salón del trono, la pagoda de plata y el pabellón Chan Chaya que están separados por grandes patios. El Salón del trono fue construido en 1917 con una torre de casi 60 metros en la que hay cuatro rostros que hacen referencia a las esculturas del templo Bayón en Angkor. Para acceder al edificio hay que atravesar una puerta pintada en blanco y amarillo que simbolizan el hinduismo y el budismo. En el interior están los tronos del rey y la reina desde los que salen unas escaleras para inclinarse ante los monarcas.

Salón del trono de Palacio real de Phnom Penh

El edificio más interesante es la Pagoda de Plata también conocida como la pagoda del buda esmeralda o Wat Phra Kaeo. El nombre de esta pagoda proviene de las más de 5.000 baldosas de plata que cubren el suelo del edificio. Las piezas están cubiertas para protegerlas por lo que no pueden contemplarse. Está situada dentro de un patio rodeado de muros en los que están pintados murales que representan el Ramakien. Como podéis comprobar todo es muy similar al edificio que hay en Bangkok. 

Pagoda de plata

Murales de la pagoda de plata
Murales de la pagoda de plata

Chedi en la pagoda de plata
Monjes en los patios de la Pagoda de Plata de Phnom Penh
En el interior está la figura de Buda esmeralda de Camboya que es muy diferente al que puede verse en Bangkok. La estatua está muy protegida por lo que no se puede acceder con cámaras. Además de la figura principal se puede visitar una gran colección de figuras de buda de diferentes tamaños.
En el exterior hay varias estupas o santuarios en el que se guardan cenizas de algunos reyes como las de los abuelos del rey actual. También hay una Mondap o biblioteca que contiene textos sagrados escritos en hoja de palmera. 

Río Tonlé Sap
Al salir del Palacio Real y la Pagoda de Plata se puede visitar el Museo Nacional o pasear junto al río Tonlé Sap. También son interesantes las tiendas de artesanía junto al museo pues se pueden encontrar algunas piezas de calidad.
Nosotros continuamos dando un paseo por la ciudad  antes de marcharnos a preparar las maletas para volver a España. Han sido dieciséis maravillosos días visitando Laos y Camboya, descubriendo increíbles lugares, sorprendentes templos y como siempre encontrando a la maravillosa gente que vive en el sudeste Asiático. Era hora de marcharse a casa pero pronto comenzaron las ganas de volver.

martes, 18 de diciembre de 2012

El terror de los jemeres rojos en Camboya

17 junio 2012
Cuando realizamos un viaje queremos encontrar espacios naturales espectaculares, edificios atractivos, monumentos fantásticos y gente maravillosa con la que relacionarse. Pero hay veces que debemos enfrentarnos a la cara más terrible de la humanidad y visitar lugares donde se muestran las barbaridades que el ser humano puede llegar a cometer. Los campos de exterminio de Choeung Ek y el museo sobre el genocidio Tuol Sleng son dos terribles lugares donde podemos conocer las atrocidades del régimen de Pol Pot y los jemeres rojos.

Entrada al memorial Choeung Ek
Para entender la importancia de estas visitas hay que conocer un poco la historia de Camboya. En el año 1954 finaliza el proceso de independencia de Camboya por lo que deja de ser una colonia francesa. El país comienza a ser gobernado por el príncipe Sihanouk que se muestra contrario al comunismo. A la vez se está desarrollando la guerra de Vietnam y el príncipe manifiesta su oposición a la intervención estadounidense. En 1970 el ministro de defensa Lon Nol traiciona al rey. Mediante un golpe de estado ocupa el poder e instaura una república alineada con los Estados Unidos y en contra de los comunistas vietnamitas. 

Campos de exterminio de Choeung Ek
Las guerrillas comunistas camboyanas se van organizando en la sombra hasta que en 1972 su control pasa a Saloth Sar más conocido como Pol Pot. En abril de 1975 los jemeres rojos entran en Phnom Penh expulsando a las fuerzas militares y a las tropas de Lon Nol. Comienza el "año cero" de la Kampuchea Democrática instaurándose un régimen dictatorial de carácter maoísta. Se pretendía establecer una comunidad exclusivamente agraria en la que los habitantes de las ciudades eran consideraos enemigos. Desaparecen los mercados, los hospitales, las escuelas, el arte, la literatura y cualquier forma de cultura. Durante los tres años del genocidio fueron asesinados más de dos millones de personas, lo que representaba casi la cuarta parte de la población camboyana.
Los dos lugares que visitamos se mantienen como recuerdo de las barbaridades que se cometieron durante el régimen de Pol Pot. La memoria de estos hechos es la única forma de intentar que no vuelvan a producirse.

Restos de huesos encontrados en  Choeung Ek
El centro de genocidio Choeung Ek es uno de los campos de exterminio que establecieron los jemeres rojos. Se encuentra situado a unos quince kilómetros a las afueras de Phnom Penh. Tras adquirir la entrada hay que tomar una audio-guía si queremos comprender lo que estamos viendo.
Una vez dentro hay que recorrer un camino señalado con paradas numeradas. A lo largo de la visita se muestran los lugares donde se realizaban las ejecuciones y las salvajes técnicas que utilizaban. Casi al final nos enseñan las fosas donde eran enterradas las víctimas y donde todavía siguen apareciendo restos de ropa y huesos. 

Fichas de ejecutados en Choeung Ek
En este campo de exterminio fueron ejecutadas más de 9.000 personas y en homenaje a las víctimas fue construida una estupa budista donde se guardan sus cráneos. A través de unas cristaleras se pueden ver los restos ordenados por sexos y edades, algunos de ellos aparecen con roturas debidas a los golpes de azadas y piedras con los que fueron asesinados.

Estupa del memorial Choeung Ek

Cráneos en Choeung Ek.
De nuevo en Phnom Penh se puede realizar la visita al museo sobre el genocidio de Tuol Sleng que es aún más estremecedor. Estos edificios fueron una escuela secundaria de prestigio y durante el genocidio de los jemeres rojos fueron utilizados como la prisión de seguridad S-21. Aquí se encarcelaron a 17.000 personas sospechosas de ser contrarios a los jemeres rojos o de apoyar al régimen estadounidense y vietnamita. 

Museo del genocidio Tuol Sleng
Las aulas del colegio fueron compartimentadas en celdas donde se realizaban espantosas torturas. La pisos altos de algunos edificios eran cubiertas de alambradas para evitar que los presos se escapasen o se suicidasen. Muchos presos eran asesinados aquí o eran enviados al campo de exterminio de Choeung Ek. Se calcula que en las fases más extremas llegaron a ser asesinadas más de 100 personas diarias. 

Celdas de Tuol Sleng

Celdas de Tuol Sleng
Los jemeres rojos llevaban un registro completo de los presos, por lo que eran fotografiados antes y después de las torturas. En varias salas se exponen paneles con miles de fotografías de las víctimas y algunas de ellas son verdaderamente terroríficas pues puede verse el horror en sus miradas. En la etapa final del régimen la locura llegó a extremos inimaginables y fueron asesinados muchos torturadores por otros que iban ocupando su lugar.

Métodos de tortura de los jemeres rojos.

Fotografías de presos en Tuol Sleng
Las salas se suceden con exposiciones de los instrumentos de tortura, las camas oxidadas donde eran encadenados los presos y varias urnas donde se guardan los restos de algunas víctimas. Una de las salas más emotivas para mí fue una pequeña muestra donde se exponen fotografías de presos que de algún modo consiguieron abandonar la carcel Tuol Sleng. En los paneles nos cuentan sus historias esperanzadoras y sus vidas tras el régimen de los jemeres rojos. 

Supervivientes de Tuol Sleng
La visita a estos dos centros es algo bastante desagradable y muchos no estaréis dispuestos a realizarla, pero para mí es algo que hay que conocer para enfrentarnos a la realidad y descubrir la maldad a la que el hombre puede llegar. 

lunes, 10 de diciembre de 2012

Paseo por Phnom Penh

16-17 junio 2012
Partimos de Battambang en autobús con destino a la capital de Camboya donde finalizaría este fantástico viaje de 17 días. Para cubrir el trayecto de trescientos kilómetros que separan ambas ciudades tardamos más de seis horas. Aunque el estado de las carreteras es bueno se tarda demasiado tiempo debido a las numerosas paradas que se realizan para descansar y comer. Llegamos a Phnom Penh con tiempo para dar un paseo y dejamos el segundo día para realizar las visitas importantes.


Museo Nacional de Phnom Penh
Phnom Penh está construida cerca de la orilla del río Tonlé Sap, que es la continuación del lago con el mismo nombre. La ciudad tiene una población aproximada de un millón cuatrocientos mil habitantes que mayoritariamente se mueven en moto, por lo que la circulación por las calles es bastante complicada. Orientarse por la ciudad es muy sencillo pues la zona central está formada por calles perpendiculares numeradas que son atravesadas por grandes bulevares con jardines.

Aerobic en Phnom Penh

Calles Phnom Penh desde el centro comercial Sorya
Camboya es un país que está en plena evolución gracias a los altos ingresos procedentes del turismo en los templos de Angkor. La capital comienza a transformarse y se están rehabilitando algunas zonas como los alrededores del monumento a la Independencia. En Phnom Penh los edificios son de unas cuatro plantas aunque se han empezado a construir los primeros rascacielos. La ciudad se está modernizando pero todavía está lejos de ser una megalópolis como Bangkok o Singapur.

Rascacielos en Phnom Penh
En Phnom Penh hay  muchos mercados especializados en diferentes productos pero el más conocido es el Psar Thmey o mercado central. Fue construido en 1937 para convertirse en uno de los más importantes del sudeste asiático y todavía está en funcionamiento. Tiene una gran cúpula central y cuatro brazos que salen del centro donde se vende joyería y bisutería. El mercado fue renovado entre los años 2009 y 2011 gracias a la financiación de la Agencia Francesa de Desarrollo para preservar este edificio de art-deco casi único en Asia.

Psar Themy (mercado central)

Cúpula y reloj del Psar Thmey
Hay varios templos en Phnom Penh pero el más importante es la Pagoda de Plata junto al Palacio Real del que os hablaré en una próxima entrada. En el paseo por la ciudad realizamos un par de paradas en algunos que nos parecieron interesantes. Wat Ounalom está situado cerca del Palacio real y de la orilla del río. Durante la época de los jemeres rojos varios edificios del templo sufrieron bastantes desperfectos por lo que tuvo que ser rehabilitado posteriormente. Actualmente es la sede de la orden budista camboyana.


Wat Ounalom
Wat Phnom es otro importante templo de Phnom Penh. El edificio original data del año 1373 y fue construido para alojar unas reliquias de buda encontradas en un árbol junto al río. La estructura actual es del año 1926 y está situada en lo alto de una pequeña colina. En el edificio central hay murales que narran las vidas de Buda antes de la iluminación. Aunque el templo parece estar en mitad de la calle hay que pagar una entrada de un dolar que los vigilantes os reclamarán insistentemente.

Wat Phnom

Edificio principal de Wat Phnom
En la próxima entrada os hablaré de los campos de exterminio de Choeung Ek y de la Prisión de seguridad S-21, que han sido dos de los lugares más estremecedores que he visitado en mi vida. Sé que va a ser muy complicado escribir esta entrada pero intentaré hablaros del horror del genocidio de los jemeres rojos y de las brutalidades que cometieron.

domingo, 2 de diciembre de 2012

Templos en Battambang - Phnom Banam

15 junio 2012
Nuestra última visita por los alrededores de Battambang es el templo Phnom Banam. Está situado a unos 25 kilómetros al sur de la ciudad y se puede combinar con la visita a Phnom Sampeau, aunque para llegar desde allí hay que atravesar una carretera de tierra que no está en buen estado sobre todo en época de lluvias. 

Phnom Banam

Escaleras de Phnom Banam
El templo está situado en la cima de una colina y para llegar hay que subir 358 escalones de piedra, y aunque no son demasiado empinados tendréis que realizar varias paradas. Al comienzo de la ascensión hay unas esculturas de Garuda y una balaustrada con forma de serpiente sagrada o naga. Casi a la llegada nos encontramos con figuras de leones que no están en buen estado.

Leones en la escalera de Phnom Banam

El templo consiste en cinco torres o prasats  construidas en el siglo XI durante el reinado de Udayadityavarman II. La estructura es muy similar a la de otros templos montaña que se pueden visitar en Angkor. El lugar está con escasa vigilancia por lo que han sido saqueados la mayoría de los relieves y figuras de apsaras. Algunas esculturas pueden verse todavía en el museo de la ciudad de Battambang.

Phnom Banam

Relieves de Phnom Banam

Phnom Banam

Al descender del templo se pueden visitar unas cuevas oscuras pero nosotros ya no teníamos linterna y lo descartamos. En el camino hacia Battambang observamos que había viñedos y parece ser que en la zona se está empezando a experimentar con una pequeña producción de vinos, aunque todavía no son muy buenos. 
En una jornada completa pudimos ver los templos de Ek PhnomPhnom Sampeau y Phnom Banam y todavía tuvimos tiempo para descansar y poder comprar los billetes de autobús hacia la capital. Battambang todavía tiene algunos lugares interesantes más, pero hay que disponer de más tiempo y el viaje estaba llegando a su fin.

domingo, 25 de noviembre de 2012

La colina de Phnom Sampeau

15 junio 2012
Una de las visitas imprescindibles en los alrededores de Battambang es la colina de Phnom Sampeau y las cuevas del exterminio. Esta pequeña montaña está situada a unos quince kilómetros en una zona de formaciones kársticas al sur de la ciudad. Para llegar al templo de la cima de la montaña hay que pagar una pequeña entrada de dos dólares y abandonar el tuk-tuk, pues hay que ascender por una empinada cuesta con cientos de escalones. Muchos chicos se ofrecerán a acompañaros como guía y puede ser interesante contratarlos pues conocen mejor los recorridos hacia las cuevas.

Templo de Phnom Sampeau
La subida a este templo me recordaba mucho a las colinas de Myanmar y la ascensión al monte Popa. A lo largo del camino hay un grupo de monos hambrientos que se acercarán para recibir comida. A veces son algo agresivos y se producen peleas entre ellos, por lo que os recomiendo que no os acerquéis demasiado. 
En la cima de la montaña hay un templo dorado al borde de la pared del acantilado. El edificio es bonito pero lo más espectacular son las vistas que se tienen de los alrededores de Battambang.

Monos en la subida a la colina de Phnom Sampeau

Vistas desde la cima de Phnom Sampeau
Templo de la cima de Phnom Sampeau
Pero el principal motivo para visitar Phnom Sampeau son las cuevas del exterminio de los jemeres rojos. Desde 1975 hasta 1979, Camboya fue gobernada por el régimen dictatorial de Pol Pot que eligió Phnom Sampeau como uno de los lugares donde cometer sus atrocidades. En la colina hay numerosas cuevas donde los jemeres rojos realizaban interrogatorios y torturas. Las víctimas eran arrojadas por los agujeros de la roca y eran abandonabados hasta que se desangraban. Se calcula que en Phnom Sampeau fueron asesinadas más de 10.000 personas. Por todas las cuevas se encontraron instrumentos de tortura, restos de ropa y miles de cadáveres. En la actualidad Phnom Sampeau se ha convertido en un lugar de peregrinaje para rendir homenaje a las víctimas del genocidio.

Cuevas en Phnom Sampeau

Escultura de Buda en un templo de Phnom Sampeau.
A mitad del recorrido hacia la cima nos podemos perder por varios caminos que recorren las cuevas. En una de ellas hay una escultura dorada de buda junto a una urna con restos de huesos y calaveras de las víctimas de la masacre. Es conveniente ir acompañados por un guía para orientarse mejor por los caminos y no adentrarse en zonas peligrosas. A nosotros nos ayudaron un grupo de estudiantes que visitaban las cuevas y algunos monjes que cuidan de los templos. Sin duda es una visita imprescindible si tenéis interés por conocer la dura historia de Camboya.
Si visitáis esta zona por la tarde os podéis encontrar con el vuelo de miles de murciélagos, tal y como nos cuenta Diego Picallo en su blog.

martes, 20 de noviembre de 2012

Templos en Battambang - Wat Ek Phnom

15 junio 2012
En los alrededores de Battambang hay muchos lugares interesantes que se pueden visitar en una jornada, pero hay que organizarse bien pues están en direcciones opuestas. Nosotros contactamos con un conductor de tuk tuk para todo el día y destinamos la mañana para visitar el templo Wat Ek Phnom y posteriormente las cuevas del exterminio de Phnom Sampeau y el templo Phnom Banam.

Buda en Wat Ek Phnom
El templo Wat Ek Phnom está situado a unos 13 kilómetros al norte de Battambang por una carretera con un par de paradas interesantes. En el camino se puede visitar una granja de cocodrilos y una antigua planta embotelladora de Pepsi, pero nosotros no disponíamos de excesivo tiempo por lo que nos dirigimos directamente al templo.  
Antes de acceder al recinto se puede contemplar una estatua moderna de buda que mide 28 metros y que tiene la base sin terminar. Al lado de la estatua hay un templo moderno con el mismo nombre que las ruinas jemeres.

Templo moderno de Wat Ek Phnom
La entrada a las ruinas es controlada por la policía turística pero desgraciadamente han sufrido saqueos y faltan algunas piezas de los relieves. El templo fue construido a principios del siglo XI durante el reinado de Suryavarman I y está formado por varias torres con tallas en las puertas. Algunos relieves están bien conservados pero otras piedras están caídas por el suelo por falta de recursos para la restauración.

Templo angkoriano de Ek Phnom

Puertas de Wat Ek Phnom

La escultura más interesante es la representación del mito hinduista del "batido del océano de leche", que es una versión en miniatura de los relieves con la misma temática del templo de Angkor Wat. 
Este templo está situado en una zona tranquila junto a un estanque y es una zona donde los camboyanos acuden para descansar y pasar la tarde.

Relieve del batido del océano de leche

Nuestra siguiente visita son las cuevas de Phnom Sampeau que están al sur de Battambang, por lo que tuvimos que volver a la ciudad para tomar otra carretera. En el camino pudimos observar algunos pueblos que colocaban unas mallas metálicas donde se pone a secar al sol el papel de arroz con el que se hacen los rollitos. Con esta pequeña producción las familias consiguen algo de dinero en esta zona de escasos recursos. Si tenéis oportunidad os recomiendo hacer una pequeña parada.

domingo, 18 de noviembre de 2012

El tren de bambú de Battambang

14 junio 2012
En Camboya la necesidad de construir líneas de ferrocarril apareció en la década de los años 30 durante la época de la colonización francesa. Se utilizaron máquinas de vapor para el transporte de mercancías entre las aldeas y la ciudad. Años más tarde durante el régimen de los jemeres rojos fueron destruidas gran parte de las líneas férreas, por lo que la población se quedó sin medios de transporte entre los pueblos. Se colocaron minas en muchos recorridos y únicamente se dejó uno de los dos sentidos de la vía por lo que poco a poco se fue abandonando este medio de transporte.

Norry - tren de bambú
Después de la caída de los jemeres rojos se limpiaron de vegetación muchos recorridos, pero ésto era todavía insuficiente para cubrir las necesidades de transporte entre los pueblos. El ingenio de los camboyanos hizo que inventasen los "trenes de bambú" o norry  para aprovechar los tramos que habían quedado en buen estado. El sistema consiste en utilizar los ejes de los vehículos militares acortándolos al ancho de la vía. Por encima se coloca una plataforma de unos 3 metros de largo realizada con bambú y un pequeño motor para mover los ejes.    
Sobre la estructura de bambú van sentadas las personas y se colocan las mercancías, objetos y animales. El sistema permite cubrir distancias pequeñas y se llegan a alcanzar velocidades de 50 kilómetros por hora sobre unos raíles inestables. Como solamente existe una vía algunas veces coinciden dos norrys en sentido contrario, por lo que hay que desmontar el tren que va menos cargado para permitir el paso del otro vehículo.

Tren de bambú - Battambang

Cruce entre dos trenes

El tren de bambú era utilizado en varias zonas del país como Poipet o Battambang, pero en la actualidad este ingenioso sistema de transporte está desapareciendo. Camboya se está desarrollando lentamente y poco a poco comienzan a restaurarse las líneas férreas entre las ciudades más importantes. Lo norrys dejarán de utilizarse para permitir la circulación de trenes más modernos y también para evitar accidentes. (más información aquí).

Desmontando el tren
En Battambang se mantiene un recorrido del tren de bambú para unir las aldeas de "O Dambong" y "O Sra Law" donde hay una pequeña fábrica de ladrillos. Ya no es un medio de transporte utilizado por la población local, por lo que se ha transformado en una atracción turística controlada por la policía. Para llegar al tren hay que tomar un tuk tuk hasta una de las dos aldeas a unos 5 kilómetros del centro de Battambang. El circuito de ida y vuelta en el tren de bambú dura una hora aproximadamente y cuesta cinco dólares por persona (un precio exclusivamente para turistas).

Aldea al final del recorrido del tren de bambú en Battambang
Los momentos más divertidos son cuando hay que bajarse porque nos cruzamos con otro tren y cuando el norry atraviesa algún puente sobre el río. Al final del recorrido se llega a un pequeño pueblo donde venden pequeños objetos de artesanía. Afortunadamente no llovió hasta que terminamos el recorrido pues es bastante incómodo utilizar el tren durante las lluvias torrenciales. Aunque ha perdido bastante autenticidad, montar en el tren de bambú es una experiencia muy interesante.