domingo, 20 de febrero de 2011

Villa de Casale

13 septiembre 2009
Dejamos Siracusa para adentrarnos al centro de la Isla. Nuestro siguiente destino es otra de las ciudades del Barroco Siciliano: Caltagirone. Esta ciudad es conocida por su alfarería y cerámica. Su artesanía es conocida desde la Edad Media y en la actualidad es uno de los lugares donde se puede comprar las mejores piezas. En Caltagirone se realizó una transformación de la ciudad después de un terremoto. Son muy conocidas su escalinata de 142 peldaños decorados con azulejos de mayólica, así como por su Duomo.


Caltagirone

Escalinatas de Caltagirone

Después de una corta visita a varias tiendas de la ciudad, continuamos nuestro recorrido hasta Piazza Armerina para visitar otro de los lugares declarados Patrimonio de la Humanidad: Villa del Casale. Esta villa romana es muy interesante por sus extraordinarios mosaicos. Se descubrió casi por casualidad en el siglo XIX, pues permaneció enterrada debido a una inundación que cubrió de barro todos los edificios. Se están realizando continuas obras de restauración de los mosaicos, por lo que en algunas zonas veréis andamios y materiales de construcción. El recinto está completamente lleno de turistas, que realizan un recorrido marcado previamente.




Mosaicos de Villa de Casale


Mosaicos de Villa de Casale


Mosaicos de Villa de Casale

A través de varias pasarelas elevadas, se pueden ir viendo las distintas estancias de la Villa. Las más conocidas son el caldarium, el frigidarium, el Salón del circo, el corredor con mosaicos de caza, y una curiosa sala con gimnastas en bikini. El estado de conservación es inmejorable, aunque algunas de las zonas han sido protegidas mediante pantallas de cristal y metacrilato para evitar la pérdida de color. La visita hay que realizarla lo más temprano posible, porque la presencia de miles de turistas es inevitable.




Mosaicos de Villa Casale


Mosaicos de Villa de Casale


Sala de gimnastas en bikini


Antes de dirigirnos a nuestro siguiente alojamiento en la ciudad de Agrigento, nos desviamos hacia el interior de la isla para comer en Enna. En esta ciudad se puede visitar un castillo Lombardo que fue construido sobre un antiguo fuerte árabe. Nosotros paseamos por los miradores para tener una magnifica vista del centro siciliano, y aprovechamos para degustar algunos platos de pasta. Todavía nos quedaban bastantes kilómetros de carretera, en la jornada con el recorrido más largo.


Vistas de Enna

Nos marchamos a Agrigento para alojarnos en el hotel Kaos. Al llegar a la ciudad comprobamos lo complicado que es orientarse en la zona moderna. Hay varias carreteras que desvían el tráfico de punta a punta, por lo que si no se lleva un buen plano, es posible que os perdáis por la ciudad. Además el mapa que habíamos impreso de Google Maps, tenía indicaciones incorrectas por lo que tardamos más de una hora en llegar al hotel.


Ciudad moderna de Agrigento

Aunque el hotel Kaos es bastante bueno, tengo que decir que no está demasiado bien situado. Cerca del hotel no hay restaurantes, por lo que tuvimos que cenar poco. Aprovechamos un rato de piscina porque al día siguiente nos esperaría una larga jornada de visitas de las ruinas griegas.

1 comentario:

  1. Hola Ramón! Tienes unos contenidos magníficos, no solo texto, también las fotos. Le he dado un vistazo rápido pero aquí hay mucha tela que cortar. Veo que publicas mucho, pero no entiendo que no tengas comentarios. En fin, ya sabemos que la cultura no vende.

    Saludos!

    Roberto

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