lunes, 26 de enero de 2015

Pueblos de la isla de Hvar

2 septiembre 2014
En la isla croata de Hvar podemos visitar otras localidades además de la capital de la que os hablaba en la entrada anterior. La isla es lo suficientemente grande para tener que buscar algún medio de transporte para movernos fácilmente. En un principio pensamos alquilar un coche para un día, pero los precios son bastante altos comparados con los del resto del país. Existe una red de autobuses que permiten moverse entre la capital y el resto de pueblos. La frecuencia de servicio es muy limitada por lo que necesitaréis la lista de horarios que os proporcionará la oficina de turismo junto al puerto de Hvar. 

Stari Grad - Isla de Hvar
Nosotros tomamos un autobús hasta Stari Grad en la zona norte de la isla. El nombre de esta pequeña ciudad significa "vieja ciudad" pues está considerada como el primer asentamiento humano en la isla. Está situada en una preciosa bahía que ha sido utilizada como puerto desde el siglo IV antes de Cristo. En esta localidad podemos alquilar bicicletas y obtener planos para realizar un recorrido por la interesante "llanura de Stari Grad". Este paisaje agrícola sigue en uso desde la época griega y mantiene parte del trazado original, por lo que fue declarado Patrimonio de la Humanidad por la Unesco en el año 2008. Nosotros hicimos un pequeño recorrido caminando pero lo ideal es apuntarse a una ruta organizada de cicloturismo para conocer mejor los detalles históricos de este sistema agrícola.

Stari Grad - Isla de Hvar

Isla de Hvar - Croacia
Desde Stari Grad podemos tomar otro autobús hasta Vrboska o Jelsa. Nosotros recomendamos conocer primero Vrboska pues es más fácil volver a la capital desde la ciudad de Jelsa. La ciudad de Vrboska es otra preciosa localidad de la isla con una población de unos 500 habitantes. Los habitantes se dedicaban a la pesca y a la agricultura en la "llanura de Stari Grad". Aunque tiene algún edificio con interés histórico lo mejor es pasear sin rumbo por las callejuelas y la estrecha bahía de la ciudad. Para nosotros es la ciudad más bonita de las tres que visitamos.

Vrboska - Isla de Hvar
Para moverse entre las ciudades de Vrboska y Jelsa lo mejor es ir caminando por la costa. Nos encontramos con un camino preparado para circular bicicletas y que va uniendo pequeñas calas de guijarros donde darse un baño. El recorrido caminando lentamente se puede realizar en una hora y es bastante tranquilo y atractivo para los que os gusten los paisajes mediterráneos. 

Cala de guijarros entre Vrboska y Jelsa

Jelsa - Isla de Hvar

Iglesia en Jelsa - Isla de Hvar
El final de nuestro recorrido es la ciudad de Jelsa que tiene su origen en el siglo XIV. Fue una ciudad importante en el siglo XIX por su dedicación al comercio y a la industria naval. Conserva algunas iglesias interesantes como la de San Iván y Santa María, y las casas de algunos artistas famosos durante el siglo XIX. Es un buen lugar para terminar el recorrido pues junto al puerto podemos encontrar algunos restaurantes de cierta calidad. Desde aquí parten autobuses hasta la capital, por lo que os recomiendo que llevéis los horarios impresos pues no hay demasiada frecuencia.

domingo, 18 de enero de 2015

La ciudad de Hvar

1-3 septiembre 2014
Uno de los grandes atractivos turísticos de Croacia es su larga costa y las islas que la bordean. Se ha calculado que hay casi unas mil islas e islotes, pero solamente un pequeño grupo están habitadas. Hay islas para todos los gustos; desde archipiélagos con gran interés paisajístico como Mljet y su Parque Nacional, a otras con un pasado histórico importante como Korçula donde supuestamente nació Marco Polo. 
Después de pensarlo un poco nosotros decidimos visitar la isla de Hvar que últimamente se ha puesto de moda. Esta isla es uno de los destinos preferidos por la gente joven, pues se han abierto varios restaurantes y locales de copas donde acuden algunos famosos en sus yates de lujo.

Ciudad de Hvar 
La isla tiene varias ciudades muy bien conectadas por barco y catamarán con el continente y con otras islas. En algunos trayectos es posible llevar el coche hasta la isla de Hvar, pero no creo que sea necesario. La tarde anterior al viaje compramos el billete para el trayecto entre Split y la ciudad de Hvar con la compañía Jadrolinija. Tuvimos bastante suerte y nos atendió una chica muy simpática que hablaba español perfectamente y nos recomendó comprar también el billete de vuelta para unos días más tarde. Supongo que en los meses de julio y agosto será más complicado encontrar billete para este barco, pues mucha gente visita la isla en un día y luego vuelve a Split.  

Puerto de la ciudad de Hvar con las islas Pakleni al fondo
La capital de la isla es la ciudad de Hvar donde se encuentran la mayoría de los restaurantes lujosos y algunos hoteles. Aquí también podemos encontrar agencias de viaje donde contratar excursiones para conocer varios pueblos o visitar las vecinas islas Pakleni. Realmente la ciudad es muy pequeña y se puede recorrer en un par de horas y luego volver al continente.

Plaza de San Esteban - ciudad de Hvar
En el centro de la ciudad se encuentra la Plaza de San Esteban donde se sitúa la Catedral, un monasterio benedictino y otro franciscano. Si comenzamos a callejear nos encontraremos con empinadas escaleras que nos llevan a la mayoría de los apartamentos privados donde se alojan grupos de gente joven. Si continuamos subiendo por la carretera llegaremos hasta la "Fortaleza Spagnola" desde donde se tienen unas vistas espectaculares de toda la ciudad y de las islas Pakleni al fondo.

Puerto de Hvar
En la zona del puerto hay un camino que bordea la costa y que tiene varias zonas para bañarse, algunos hoteles y caros locales de copas con la música a todo trapo. No os esperéis encontrar Ibiza o Mykonos pero está bastante animado. 
Si tenéis pensado alojaros en la isla hay que reservar con antelación pues la oferta es cara y escasa. Hay muchos apartamentos privados que se pueden alquilar por días pero no están en el mismo centro de la ciudad. Nosotros estuvimos tres días pues queríamos conocer otras pueblos de la isla y nos alojamos en una casa particular de una familia muy amable que nos animaba a quedarnos más tiempo. Nos hubiese gustado quedarnos más pues la isla tiene otros rincones muy bonitos como ya os contaré en la próxima entrada.