Geysir

3 de septiembre 2011

Otro de los lugares de interés del conocido "Circulo Dorado" de Islandia, es el valle de Haukadalur. En éste área geotermal se encuentran algunos de los géiseres más conocidos del mundo. De hecho la palabra géiser viene del nombre de una de las fuentes termales de la zona. El acceso a esta zona es gratuito, pero está acotado para evitar accidentes. Hay una zona de aparcamiento con cafeterías y algunas mesas de picnic para tomar algo, 

Área geotermal de Geysir

El fenómeno de los géiseres es bastante escaso en el mundo, porque tienen que darse ciertas condiciones en el terreno coincidiendo con condiciones muy concretas de los cursos del agua. Las zonas más importantes son el Parque Yellowstone en Estados Unidos, los volcanes de la península de Kamchatka en Rusia, los géiseres de Tatio en Chile, la zona volcánica de Taupo en Nueva Zelanda y éste área en Islandia. Algunas áreas importantes han dejado de ser activas de forma natural, pero hay otras que han sido destruidas por la intervención humana. 

El gran Geysir de Islandia (el que da nombre al fenómeno) estuvo a punto de dejar de ser activo, debido a que se le arrojaban piedras y productos químicos para que entrase en erupción. En ocasiones llegaba a lanzar chorros hasta de 80 metros con una frecuencia periódica. En la actualidad continúa en activo con menos fuerza y con menor actividad.  Pero la atracción turística más famosa es el Strokkur que llega a tener 20 metros, y que explosiona cada 5-10 minutos aproximadamente. Hay que ser bastante ágiles para fotografiarlo bien, porque dura un segundo escaso (yo no tuve mucha suerte).

Strokkur en dos momentos de la erupción.

Además de los dos géiseres principales hay otros más pequeños: Sódi, Smiður, pequeño Geysir y pequeño Strokkur. También se pueden ver algunos depósitos de agua caliente sulfurosa de diferentes colores. Hay que tener bastante cuidado pues hay algunas a más de 60 grados y puede ser peligroso, aunque están acordonadas.

Konungshver

Blesi

Empezamos a acostumbrarnos al olor a azufre, que será cada vez más familiar porque el agua de las duchas de casi todos los hoteles huelen así. A pocos kilómetros de éste área se encuentra la catarata Gullfoss, que es una de las que más me gustó del país.