Monte Fuji - Hakone

17 abril 2008

Nos despedimos de Tokyo, con muchas ganas de volver. Hoy hacemos una excursión al Monte Fuji y Hakone, que habíamos contratado desde Madrid. Nos citaron en la puerta de un hotel y allí recogían a todos los turistas de diferentes lugares. Salimos en el autobús por una carretera con un gran atasco. Comenzamos a subir por una carretera que va atravesando diferentes estaciones del Monte Fuji, pero hace muy mal tiempo y mucha niebla. Llegamos a la quinta estación que está a unos 2.300 metros y desgraciadamente no pudimos ver nada.



Hacia Monte Fuji




Paisaje  monte Fuji




Quinta estación



Después la excursión continúa hacia un funicular para ver una zona volcánica, donde se supone que también hay unas vistas extraordinarias, pero igualmente la niebla nos impidió ver el espectáculo. Arriba pudimos ver algunas salidas de vapores de azufre.



Teleférico 




Emanaciones de azufre



De nuevo nos llevan en autocar, y nos dirigimos al lago Ashi para tomar un barco turístico que parece de piratas. En el lago la lluvia era muy fuerte, pero aún así pudimos contemplar un Torii que parecía salir del lago y un entorno montañoso precioso. 

Barco lago Ashi



Torii en el lago Ashi




Muelle del lago



Aproximadamente después de un trayecto de tres cuartos de hora nos dejan en Hakone. Una parte de la excursión volvía a Tokyo, pero nosotros teníamos contratado la estancia de una noche en el Ryokan Shunkoso. Nos recogieron en taxi y nos llevaron a disfrutar una noche inolvidable en un alojamiento típico japonés. En una entrada anterior ya os he hablado anteriormente sobre este tipo de alojamientos. Hay que dormir sobre tatami, y casi siempre tienen baños termales. Este Ryokan tiene bastante experiencia con los turistas extranjeros y no os costará haceros entender.



Entrada del Ryokan con la lista de huéspedes





Jardines del Ryokan



Las vistas desde la habitación "Sakura" eran muy bonitas. Después de un baño y un paseo por los jardines con nuestros yukata nos subimos a cenar. La cena nos la sirvieron en la habitación y pudimos degustar algunos platos de la Cocina Kaiseki. Cuando acabamos, llamamos a la recepción para que nos preparasen los futones para dormir. Nos dejaron una jarra con té y nos tumbamos para intentar dormir. Al principio cuesta, pero al final son más comodos de lo que se piensa.



Vistas del Ryokan




Habitación





Cena




Futones



Una experiencia inolvidable para todos los que amáis Japón. Descansamos unas cuantas horas para que al día siguiente nos llevasen a la estación de trenes de Odawara, para tomar el tren Shinkansen hasta Kyoto.